viernes, 24 de febrero de 2012

SDDR: Una buena solución de Retorna

Retorna es una ONG que promueve el SDDR (Sistema de Depósito, Devolución y Retorno de Envases). Esta propuesta nos gusta porque recupera, aboga y mejora el antiguo sistema de devolución de envases; especialmente de un uso.

Y es que, antiguamente, todos recordamos como las tiendas de barrio se cobraban un recargo en concepto de alquiler de la botella de cristal (casco) a reembolsar en el momento de su devolución. Este sistema responsabilizaba a todos los miembros de la cadena de consumo y era eficaz de cara a la  reutilización del envase. Todo esto se perdió con la tendencia, diseñada para las grandes superficies, del envase (sobre todo de plástico) de usar y tirar; creando un gran problema de eliminación de estos residuos. Cada día circulan 51 millones de nuevos envases que en un periodo muy corto se convierten en basura sin ningún uso.

Algunos estados de Estados Unidos y Alemania han recuperado y mejorado el antiguo sistema de devolución con muy buenos resultados.

Todo está bien explicado en este vídeo:

miércoles, 22 de febrero de 2012

KNIT GRAFFITI EN MADRID


Los domingos, los conTÚmistas somos practicantes... del slow sunday, claro. Dedicamos el día del Señor a pasear por la ciudad, tranquilamente, con tiempo para descubrir y sorprendernos con cosas, como estos dos árboles cubiertos de knit graffiti en plena plaza del Museo Reina Sofia. Aquí os dejamos las fotos, y os animamos a pasaros por si las autoridades competentes han tenido a bien no quitar el colorido ganchillo de los troncos y las ramas.




DISEÑO RECICLADO: LA SEGUNDA - Y MEJOR - VIDA DE LOS CUBIERTOS DESECHADOS




 El diseño también parece haber llegado a la conclusión de que hay que salvar el planeta y optar por materiales de desecho a los que se les dé una segunda vida. Así que diseñadores de todo el planeta han puesto el ojo en todo tipo de objetos que acaban en la basura y, a la vez que hacen auténticas maravillas a jugar por los resultados – mandan el mensaje de que reciclar es chic. Dedicamos este artículo a un objeto del día a día convertido en alto diseño 100%. Ah, y si tienes cubiertos viejos en casa, inspírate, igual se te ocurre algo…








viernes, 17 de febrero de 2012

MODA DE COMERCIO JUSTO: ¿POR QUÉ?




Puede parecer insignificante el hecho de que tú o yo elijamos una prenda de algodón orgánico o de Comercio Justo pero realmente no lo es. Ese pequeño acto puede generar un gran cambio al otro extremo de la cadena de producción. Te explicamos los motivos.

Empecemos por el impacto medioambiental de la moda, algo que debería preocuparnos a todos. Las imparables exigencias de la moda, con sus “must”, “it” y tendencias que nos marcan las revistas y el continuo desfile de celebrities en las alfombras rojas del planeta hacen que las prendas que tanto atesoramos el año pasado este año no valgan para nada. La exagerada cantidad de ropa que consumimos deja una huella de carbono insostenible para el planeta Ojo a los datos. El sector textil en nuestro país produce al año más de 3 millones de toneladas de CO2, 2 millones de toneladas de basura y utiliza 70 millones de agua. Más de 1 millón de toneladas de ropa descartada acaba en los basureros  cada año. Eso significa que, de media, cada uno de nosotros tira a la basura ¡30 kilos de ropa!

Esta sobreproducción también tiene efectos sobre la salud. La Organización Mundial de la Salud calcula que, cada año, 3 millones de personas son envenenadas por los pesticidas, la mayoría de ellas en países en desarrollo. Cuando los pesticidas se liberan en el medioambiente, comunidades enteras pueden verse afectadas .




Debemos consumir menos ropa y utilizar las prendas durante mucho más tiempo. Pero, además, la ropa que compramos debe tener un “valor añadido”: que beneficie a los granjeros y a los artesanos que la producen. Aquí es donde entra el Comercio Justo.

El Comercio Justo piensa en el futuro, trabaja mano a mano con los productores y permite que las comunidades inviertan en iniciativas medioambientales. Su planteamiento es el siguiente: si a los productores y los agricultores de algodón se les da la oportunidad de cuidar el medioambiente, sin duda lo harán. ¿Por qué iban a cargarse su medio de vida? La respuesta ahora, tristemente, es que lo hacen porque les empujan los míseros precios que consiguen por sus cosechas de algodón.

El Comercio Justo y las ONG’s que lo apoyan y lo difunden hacen una labor importantísima: enseñar a proteger el medioambiente y ayudar a las comunidades más pobres a tener una forma de vida digna. Enseñan y apoyan a las comunidades a cultivar sin el uso de los peligrosos pesticidas y con un menor gasto de agua. Se necesitan 2.000 litros de agua para producir una camiseta de algodón convencional, y ese consumo se reduce un 60% si se trata de una prenda de algodón orgánico o de Comercio Justo.

Tal y como están las cosas y a la espera, una vez más, de que los gobiernos realmente tomen el asunto en sus manos, lo único que podemos hacer es ayudar a estos pequeños granjeros consumiendo algodón orgánico y haciéndolo a través de las muchas asociaciones de Comercio Justo que existen.

La utilización y compra de productos de Comercio Justo promueve: 



RECICLAJE CREATIVO: ECO-FRIENDLY AMERICAN ARTISTS



¿Puede haber algo más americano que un retrato de Abraham Lincoln? Ummm... quizás una señalización de la mítica Ruta 66 o una matrícula de coche que ponga "California" o "NY Estate". Pues, entonces, doblemente americano será un retrato de Lincoln hecho de matrículas de coche... Americano y eco porque las matrículas son recicladas. En lugar de dejar las placas en un basurero a oxidarse, esta gente con mucho talento las han recogido y utilizado para hacer mil y una cosas. Las que su imaginación permita. Pero todas ellas con olor a hamburguesa... muy yankees.



El superman es de Michael Kalish, cuyas obras hechas con matrículas están empezando a cotizarse mucho.


Esto es obra de The Recycled Art Company, que lleva ya años creando obras de arte con materiales de deshecho.


Aaron Foster es el artista californiano creador de esta bandera americana, y uno de sus materiales favoritos son las placas.


Un vintage elebado al cubo es lo que hace Carol Braden al darle a matrículas antiguas (algunas ellas de los años 20) esta nueva vida en forma de guitarras antiguas.

Y el retrato presidencial con el que abríamos el artículo es de Jennifer Savo.

miércoles, 1 de febrero de 2012

COSMÉTICA NATURAL DE LA A a la Z (3ª PARTE)


Con esta tercera entrega, terminamos nuestra serie sobre los ingredientes que debes buscar y evitar en los productos de belleza y cuidado personal que utilizas.

S 

de
Sebacato de dibutilo
Antiguamente, lo contenían todas las lacas de uñas del mundo pero, afortunadamente, la Unión Europea lo prohibió por sus efectos nocivos sobre la salud. Aún así, se puede encontrar en productos fabricados en otras partes del mundo, así que ¡ojo!

de Surfactantes de etixolato
Se utilizan como agentes espumantes en jabones, gels de ducha y champús y los puedes identificar en la etiqueta por la inclusión de “PEG” u “oxinol” en los nombres de los ingredientes. Tienen tendencia a oxidarse y, cuando lo hacen, pueden irritar la piel y, con un uso continuado, provocar eczema.

T
de Triclosán

Está presente en muchísimos productos de hygiene, a los quese añade porque combate las bacterias. No es una sustancia especialmente peligrosa pero recientes estudios demostraron que, si entra en contacto con agua tratada con cloro, puede producir gas cloroformo. Tampoco es como para entrar en pánico porque, al parecer, la cantidad generada es inferior a la concentración presente en una piscina.

U
de Urea

La urea se utiliza muchísimo en agricultura como fertilizante al ser una fuente adicional de producción de nitrógeno pero, curiosamente, también se usa mucho es cosmética. En este campo, se utiliza como un conservante antibacteriano y se puede encontrar en muchos productos, aunque las cremas depilatorias tienen una mayor concentración.L as cantidades presentes en los productos de belleza no son demasiado altas, no obstante, los estudios demuestran que la urea tiene la capacidad de alterar la estructura de la epidermis, haciéndola más vulnerable a otras sustancias químicas.

V
de VP-Metacrilamida

Se trata de un polímero que se usa en las mousses y geles para el cabello. No es especialmente peligroso ni nocivo por sí solo pero normalmente está contaminado con tóxinas, cancerígenos y otras cosas que, desde luego, no apetece nada poner sobre tu piel. En Europa ya está prohibida,aunque puede encontrarse en productos fabricados en EEUU. 





Para terminar nuestra serie sobre los materiales a identificar en los productos de belleza y cuidado corporal que utilizas, queremos invitarte a ver el documental de Annie Leonard sobre el tema, The Story of Cosmetics.

La historieta de animación de Leonard ha llegado a millones de personas en todo el mundo gracias al éxito masivo de su Historia de las cosas (Story of Stuff) y, aunque es cierto, que su visión puede ser algo simplista (eso dicen sus críticos), resulta tremendamente efectiva al explicar en tan sólo unos minutos y de forma absolutamente accesible para todos los peligros de la cosmética comercial. Al menos, realmente te hace pensar sobre el tema. Pincha aquí si quieres echarle un vistazo.



Ah, y si te interesa echarle un vistazo a nuestros posts anteriores sobre el tema:

Primera parte
Segunda parte

La NO utilización de la cosmética tradicional fomenta:







COMPENSACIÓN: HUELLA DE CARBONO


Un poco ( por decir algo) decepcionados por los resultados de la cumbre de Durban y a  la espera de que los estados realmente se mojen en la reducción de las emisiones de CO2, hay una manera en la que los ciudadanos de a pie, como tú y como nosotros, podemos aligerar nuestra huella de carbono sobre el planeta. Se trata de la compensación, algo tan sencillo como lo que haces cuando no quieres engordar y compensas un atracón con comer frutas y verduras al día siguiente. Más fácil, imposible.

A estas alturas, es difícil que alguien no haya oído el término "huella de carbono" y la incidencia de la emisión de gases invernadero sobre el clima- a menos que haya vivido en otro planeta en las últimas décadas - pero, por si acaso, aquí debajo dejamos su definición enciclopédica:

"La totalidad de gases de efecto invernadero (GEI) emitidos por efecto directo o indirecto de un individuo, organización, evento o producto".

También a estas alturas todos sabemos que las auténticas claves para reducir el acuciante problema de las emisiones de CO2 está realmente en manos de gobiernos y grandes corporaciones que deben tomar medidas ¡ya! para no llevarnos al completo desastre medioambiental. Cansados de que esas medidas no lleguen, los terrícolas no tenemos más remedio que tomar el asunto en nuestras pequeñas manos y esperar que nuestras pequeñas acciones, sumadas entre sí, generen el cambio que necesitamos.

Comprar local, comer productos de temporada, reducir nuestro gasto energético en cualquier manera que podamos... todas ellas son medidas que podemos - y debemos - empezar a aplicar. Como ninguno de nosotros somos mártires y hay cosas que no somos capaces de dejar de hacer, la propuesta del conTÚmismo es bien sencilla. Igual que, cuando te metes un atracón de chocolate un día, al día siguiente te cortas con lo que comes; cuando te pasas gastando energía, puedes compensarlo de diferentes maneras.Aquí te dejamos algunas ideas para ahorrar ¡hasta 250 kg de emisiones de dióxido de carbono en un año!

  •  Sustituir 9 bombillas normales de 60w por las de bajo consumo. 
  • Reducir la velocidad de 110 km/h a 90 km/h  durante 6.000 km. 
  • Cada 4 comidas, sustituir una ración de carne por una de legumbres. Una familia de cuatro miembros, a lo largo de un año, reduciría esa cantidad. 
  • Plantar 21 árboles, que procesarían esa cantidad de CO2 anualmente.

Existen iniciativas a nivel global para realizar esta "compensación". En www.CeroCO2.org ponen a tu disposición una calculadora para que puedas evalúar con exactitud cuántas emisiones generas con alguna acción, y la qué acciones compensatorias puedes hacer para compensarlas. Y en www.ekopass.org te ofrecen "packs de compensación" y. además, destinan sus ingresos fondos a proyectos que luchan contra el cambio climático.

Así que, ya sabes, la próxima vez que te mueras por comerte un mango que ha cruzado un continente entero para llegar desde Kenya a tu ciudad, no te cortes y zámpatelo pero compénsalo comiendo productos de tu zona durante un par de días. ¡Funciona!